Según yo ahora que estuviera en China viviendo, iba a escribir diario para el blog. Tenía toda la intención del mundo porque así fuera pero realmente resulta imposible. Hay muchas limitantes y obviamente la más importante es la censura. Aquí no puedo abrir Facebook, Blogger y Twitter, que son páginas que estoy acostumbrado a checar más de 15 veces al día. Pero igual hay otros inconvenientes como la falta de tiempo y hasta la flojera ( qué raro no?).
Hoy vuelvo a escribir porque hace rato estaba leyendo que la Selección se va a concentrar en Alemania antes de ir a jugar el mundial a Sudáfrica y eso me trajo mil recuerdos a la mente y sobretodo momentos de mucha nostalgia. Es por esta razón que estoy de vuelta al blog.
Esta ha sido una semana increíble, el último mes ha sido muy bueno por todo lo que ha pasado acá y también en México. Hace 3 semanas llegó mi mamá y estuvimos muy a gusto unos días aquí en Shanghai y luego nos movimos a Beijing, donde nos pasó de todo: desde una señora escupiéndome en la cara hasta unas ampollas que no dejaban a mi mamá caminar por aquellos lares. Le he dicho mil veces que no se compre esos zapatos baratos Payless Shoes pero no me hace caso . Jajaja. No es cierto, la realidad es que llevaba sus “cacles” de El Corte Inglés, súper burgueses y aun con ellos estuvo sufriendo. Después de nuestras peripecias, ella se regresó a México y yo en el tren nocturno a Shanghai. Llegué un sábado en la mañana y directo a clases de reposición, ahora si que como en el Turista: no pasé ni por México (osea mi casa)! Como el juego de la Selección era el domingo a las 6 de la mañana pues ya mejor ni dormimos y nos pusimos una de esas borracheras macabronas que ni sentimos y valió la pena porque al final vimos el partido del TRI de mi corazón y disfrutamos la ida al Mundial, casi que hasta me voy a celebrar a uno de esos templos budistas que tienen por aquí.
La semana pasada fue el Masters de tennis y vinieron los mejores del mundo excepto Federer y obviamente yo no podía faltar. El martes fuimos como 15 del Tec y nos la pasamos muy a gusto en el partido de un francés con el que Ana Lucette quería ligar, obvio fue imposible. Al día siguiente yo decidí irme sólo porque se nos pegaba uno que otro villamelón que namás no sabe de tennis y que flojera tener que estar explicando. El caso es que me senté sólo y cuando se acabó un juego, Gael Monfills, uno de los mejores del mundo, aventó una pelota firmada y se elevó increíblemente y que me aviento por ella y que los chinos se sorprenden por mi atrapada y que me empiezan a aplaudir! Hasta penita me dio! Y si pensaron que eso era todo , pues se equivocaron. El viernes volvimos a ir y ahora si fui con los que saben y a medio partido estábamos en pleno desmadre y le regalaban un barril de cerveza a los que hicieran más escándalo y que salimos en las pantallas del estadio y que nos lo ganamos ¡ Hasta chela gratis tuvimos, 5 litros namás para nosotros.
Esa ha sido lo más importante en los últimos días. Ahorita ya es la 1 de la mañana y apenas se fue la Ayi, que es la señora que limpia la casa, aún no puedo creer todo lo que trabajan. La ñora viene como de 8 de la noche y se va a las 12 y no dudo ni un chirris que empiece a trabajar a las 6 de la mañana. Así es la vida aquí en China, así sí se puede entender cómo es que crecen 10 por ciento al año.
lunes, 19 de octubre de 2009
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